lunes, 9 de noviembre de 2015

al Chico del Violín:

Si algo he aprendido en estos sorprendentemente casi cuatro años de carrera, y he aprendido poco, es que el derecho al sueño es poco menos que una utopía. Que cuánto más creces, menos duermes. Que si más mayor, más cansado. Y que al final, la única salida es soñar despierto. Por imperativo legal. Soñar despierto por no poder hacerlo dormido.
Así estamos. Así vivimos. Eso sé.

Sé ahora que a nadie le gusta el café, el azul de las ojeras, el cristal frío del autobús, el pitido insolente de las puertas del Metro, las prisas, no llegar. Que nadie quiso nunca convertirse en ese revoltijo de cerebro y nada que se transporta seminsconsciente bajo el suelo de Madrid. Y que sin embargo lo hacemos. Nos rendimos sin luchar apenas. Cada día.

El mundo es gris oscuro casi mierda cuando se madruga. El mundo es hostil cuando aún no ha amanecido. Y en invierno además, es frío.

El mundo da asco que te mueres antes de las siete de la mañana. Asco puro. Asco feo.


Supongo que por eso él.
Él que tiene los ojos hundidos y los hombros encogidos. Que es alto y delgado. Que mira de medio lado con los párpados casi dormidos y un cuarto de luna bajo la nariz.

Por eso él, que apoya la mejilla en una almohada de madera y sueña despierto. Él, que construye cientos de primeras sonrisas cada mañana, merece cada una de estas letras. Y cada una de las que he escrito desde que la linea gris, circular, empezó a verme cabecear de madrugada.

Cada letra y cada bostezo, cada sonrisa y cada moneda que no he sido capaz de regalarle. Desde el primer día que él apareció, tocaba Bach, y amaneció un poco. Desde entonces, y hasta ahora.

Cada vez que aparece y cada vez que desaparece. Cada vez que no está. Y sobre todo cada vez que vuelve. Cuando Harry Potter hace de Moncloa Navidad, y cuando Dvorak trae Rusia en noviembre. Y cuando me mira y creo que ha reconocido mis ojeras. Y cuando sé que no.

Cada vez, gracias.




3 comentarios:

Anónimo dijo...

Duerme menos, sueña más.

gregatrey dijo...

Pequeño desconocido Anónimo:

si duermo menos, me evaporo.

momi dijo...

Feliz Navidad, a día 15 de diciembre , por fin.
¡¡¡que suerte tiene !!!
le va encantar.