sábado, 28 de abril de 2012

La gent normal - Manel

Llueve en Barcelona pero a él no le importa. Apoya las manos en el marco de la ventana, saca la cabeza y se moja. Y mientras se moja, pasea la mirada por el campo. Le gusta mirar al campo mientras se moja, porque es lo que ha estado haciendo estos últimos cuatro años. Sacar la cabeza fuera, sin miedo a empaparse, mirar al campo y sentir que puede cambiar el mundo. Desde allí puede ver a los chicos abrazándose, llorando, gritando, puede oír el griterío de la grada, y se ve a él mismo, lanzado una y otra vez en volandas. Sonríe y piensa que tiene ganas de llorar. Llora porque sabe que se despide de algo que ha sido su vida durante toda su vida, ¿Cómo explicarse eso?  ¿Cómo entender que necesita dejar de hacer algo que ama, para no acabar odiándolo? Nadie lo entenderá, lo sabe. Pero a él no le importa.
Solo le importa guardar los grandes momentos que tiene que llevarse de ese campo. El primer gol de ese chaval pequeño que él impulsó hasta el cielo, la lesión de rodilla, las carreras hasta el córner para celebrar un triunfo más, la sonrisa de sus hijos, que lo miran con ilusión desde alguno de los asientos de la grada , la felicidad de saber que haces algo sumamente bien, el himno, la grada, los colores… Es la última vez que mira el campo desde esa ventana así que tiene que memorizarlo todo.  Espera unos segundos más, respira y se moja. Y cuando lo tiene todo, cuando está totalmente seguro, cierra la ventana, se pone la americana y se dirige a la sala de prensa. Josep Guardiola i Sala tiene ganas de llorar, pero es feliz.

Versión de Common People, de Pulp

lunes, 23 de abril de 2012

Noches de boda - Joaquín Sabina y Chavela Vargas

Que te queden bien los gorros y las camisetas grandes.
Que el día de Sant Jordi encuentres en cualquier lugar aparentemente casual, el libro que sin saberlo andabas buscando.
Que en la primera página alguien haya pegado un post- it verde que diga "Para ti"
Que el público de una maratón aplauda al que va en cabeza, pero ovacione al abuelo que lleva más de 60 años corriendo y que llega poco antes que el coche escoba.
Que la profesora más borde llame "Chiquitín" al profesor más serio.
Que siempre tengas una superficie en blanco sobre la que pintar.
Que tengas algo que abrazar cuando necesites algo que abrazar.
Que la pared de tu habitación sea del color que sería tu alma.
Que tengas algo que golpear cuando necesites algo que golpear.
Que sepas silbar, cantar y bailar.
Que sepas sonreír, llorar y gritar.
Que la luna siempre esté dispuesta a escuchar lo que le cuentas.



sábado, 21 de abril de 2012

Historia de un sueño - La Oreja de Van Gogh

Cena con su familia. Calçots y Buenafuente. Dios inventó los calçots para que el ser humano ( ese hijo tonto suyo) comiera verdura, y a Buenafuente para que los españoles riamos. Reír solo lo sabemos hacer los monos y nosotros. Cena con su familia y se siente bien, comiendo con las manos y riéndose de un hombre vestido de pollo.
Antes de ir a dormir mira por la ventana una última vez para soplarle a la luna. Cierra los ojos, infla los pulmones y deja escapar el aire lentamente concentrada en su deseo para el día siguiente. Cuando vuelve a inspirar, puede sentir su cuerpo cargarse de vida.
Aún así le costará dormirse, como siempre. Soñará con su abuela, que la llama chiqueta, y despertará con una sonrisa en los labios y el sol en los ojos. A primera toca historia. Y llega tarde.




Vitamina Sol - Antònia Font

Vuelve a casa pedaleando y come sola, viendo la televisión. Una de las ventajas de que la 2 no tenga anuncios es que puedes ver "Tu vida en 65 minutos" sin interrupciones, en silencio. Pocas cosas logran emocionarla tanto como Albert Espinosa.
Merienda ColaCao con leche, café, azúcar y miel, un manjar que descubrió al mezclar todos los componentes del desayuno militar, en Senegal. Merienda viendo Big Bang Theory. Y se rie.
Estudia. Está acabando Bachillerato y hay que estudiar. Entre fechas, fórmulas, nucleótidos e imperativos categóricos, mira por la ventana. El viento agita las hojas y aparta las nubes, tras las que aparece un sol brillante. El sol brilla especialmente bien a finales del invierno.


Dame un grito - Sr Trepador

El colegio le gusta y no le cuesta admitirlo. Con los años ha descubierto que no debe reducirlo solo a las 5, 83 horas ( 350 minutos) que tiene que mantenerse sentada y en silencio, que lo realmente importante es lo que hay entre medias. Los profesores, los compañeros, los chistes, bromas y pequeñas y grandes discusiones que han convertido el colegio en algo más que una obligación.
El profesor de historia se ríe , la de física viene a enseñarles su bebé, la de filosofía se despide con un brillo en la mirada, al de música le han puesto gafas.
Comparte uno Risketos y millones de palabras con sus amigos, camparan sus planes de futuro y comienzan a organizar un maravilloso e improbable viaje a África. Pocas cosas unen más que las yemas naranjas, las sonrisas, y un puñado de recuerdos en común. No es el colegio, es su familia.



Don´t stop me now - Queen

Le despierta el sol en la cara. Y menos mal, porque el despertador no suena. Nunca suena el despertador, porque no tiene. Un día hizo una comparativa y decidió que prefería llegar tarde a clase que pasar el día enfadada. Odia que le despierten, llega tarde todos los días.

Baja la cuesta que separa su casa del colegio pedaleando a super velocidad. Le gusta esa sensación. El frío en los dedos, el viento en la cara y Freddie Mercury cantándole al oído, mientras empieza la clase de lengua. Sabe que estaría bien si algún día llegara a la hora, pero un día decidió que prefería perder esos cinco minutos iniciales que la libertad que le da ver amanecer desde una bicicleta. Y eligió bien. Muy bien incluso.


sábado, 14 de abril de 2012

Quiet Town - Josh Rouse

Creo que lo que más me gusta  del lugar del mundo donde vivo es que, de vez en cuando y sin previo aviso, se para el mundo, y ya no tengo examen mañana, ya no juega el Barça el domingo, ya no he discutido con mi hermano, ya no he perdido el móvil,  ya no tengo sueño, ni frío , ni hambre.

Se para el mundo y, a veces, pasa un tractor por delante de la ventana, y detrás de él, ajenas a mí, a mi examen y, desde luego, al Barça, las ovejas.


lunes, 9 de abril de 2012

Keep me in your heart for a while - Warren Zevon

Relaciones. El ser humano relaciona conceptos continuamente. Une unas ideas a otras sin cesar, creando cadenas infinitas en las que almacena todo su conocimiento. Relaciones que nos permiten aprender y recordar. Relaciones que nos permiten relacionarnos.

Relacionas al de sociales con Ismael Serrano, a tu mejor amigo con Amaia Montero y a tu tío con los Mojinos Escozios.Y etcétera etcétera. Sin darte cuenta unes cada una de las personas que conoces con cada una de las canciones que te gustan. Pero no te quedas ahí. Ni mucho menos.

Relacionas el chubasquero rojo de tu padre que te queda enorme con el chico mayor con el que compartiste una tarde lluviosa de atletismo, las amapolas con el pueblo minúsculo que tienes en León, las croquetas con tu abuela , los cacahuetes con ese viaje que te marcó para siempre, y el mar... el mar lo cargas de vacaciones, de infancia, de juguetes y joguinas, de sal, de sol y de sonrisas.  A tu cerebro le gusta, le encanta el juego y continúa.

Y así es como ajedrez es sinónimo de abuelo Antonio, mientras que higos y tomates significan abuelo Toñín. Porque ajedrez significa urbano y tomates solo puede significar rural. Así es como el 85% de tu vida se puede resumir en las palabras Harry y Potter. Dos palabras, que podriamos desarrollar un pelín más si dijésemos Ana, Teresa, Helena, Doraemon, Novita, TJ, Spinelli, Gus, Bins, Phineas y Ferb. Dos palabras que incluso podríamos sustituir por una, Marina. Porque tu nombre también es una relación de conceptos, la mayor de todas. La más importante.

Botones, plastidecor, renacuajos, escayola, chupa-chups de yogurt de fresa. Relaciones que te permiten recordar, relaciones que no te dejan olvidar. Relaciones.